En el noreste de Nigeria se encuentra la Diócesis de Maiduguri, la más grande del país, donde más de 2,2 millones de personas están desplazadas debido al conflicto con el grupo islamista Boko Haram. Doscientas iglesias, escuelas, hospitales, tiendas y casas particulares fueron destruidos en la Diócesis, lo que ha generado un impacto negativo en la educación de los niños y, en consecuencia, en un futuro mejor.

Hoy en día, el 90% de los refugiados vive en los cuatro campamentos cercanos a la ciudad de Pulka, donde el ejército nigeriano brinda seguridad. El Padre Christopher, el párroco de Pulka, estima que hay unos 14.000 católicos, incluidos 9.000 niños, que viven en sencillas tiendas de campaña en estos campamentos. Muchos de estos niños no pueden asistir a la escuela porque sus padres no tienen cómo pagar las matrículas y materiales escolares.

Es muy triste lo que está pasando en Nigeria, especialmente con los niños. Lamentablemente, el mundo no los ve, o quizás no quiere verlos, pero ¿también son invisibles para ti?

Nuestro objetivo es: 

Ayudar al Padre Christopher a reabrir la Escuela Católica de St. Paul en Pulka, que cerró en 2014 debido a los ataques terroristas. La escuela proporcionará educación a 700 infantes de la comunidad de Pulka, desplazados internamente: 425 niñas y 275 niños. El proyecto tiene como objetivo ayudar a la Diócesis de Maiduguri a pagar las matrículas escolares de estos niños durante 3 años.

Con apenas $50.000 pesos o más por mes, tú puedes ayudar al Padre Christopher a proporcionar educación a un niño desplazado internamente y brindarle la oportunidad de tener un futuro mejor.

Tu generosidad puede cambiar vidas. Al donar puedes marcar una diferencia y traer esperanza a aquellos que lo necesitan. Tu apoyo irá destinado a brindar una calidad de existencia digna, seguridad y un futuro más brillante a estos niños.