Carisma ACN
Brindamos apoyo espiritual y material a la Iglesia católica
Ayuda a la Iglesia que Sufre (ACN) es una obra de ayuda pastoral que, a través de la oración, el sacrificio, la evangelización y la caridad, brinda apoyo espiritual y material a la Iglesia católica, allí donde es perseguida o discriminada, o donde no dispone de los medios suficientes para el cumplimiento de su misión.
Esta Fundación Pontificia reconoce su carisma como un don de Dios para la Iglesia universal, con gratitud hacia su fundador, hacia los sucesivos papas, hacia los colaboradores y benefactores y, en especial, hacia los mártires y confesores de la fe que han contribuido a constituir esta Obra.

Nuestro Carisma es un don de Dios para la Iglesia universal
Carisma ACN
Carácter pastoral: característica central de ACN.
Oración: “El que permanece en mí y yo en él, ese da fruto abundante” (Jn 15,5).
Sacrificio: “Si un miembro sufre, todos sufren con él…” (1 Cor 12,26).
Evangelización: “Nos apremia el amor de Cristo” (2 Cor 5,14).
Caridad activa: “Como yo os he amado, amaos también unos a otros” (Jn 13,34).
Directrices Espirituales
El código genético de Ayuda a la Iglesia que Sufre se encuentra recogido en sus Directrices Espirituales. Nos ayudan, a benefactores y colaboradores, a seguir volcándonos en el amor a nuestros hermanos que sufren por causa de su fe, hasta donde ese amor duele y, a veces, aún más allá.

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